La Generalitat Valenciana no podía quedar, ni mucho menos, al margen
de las políticas de austeridad que están presidiendo la actuación de la
mayor parte de las administraciones públicas, sean estas nacionales,
autonómicas o locales.
Lo cierto es que, dada la
situación de crisis económica que vivimos, no parecía muy razonable que
las administraciones públicas siguieran manteniendo determinadas
prebendas dirigidas a sus altos cargos, así que es ahí donde se ha
comenzado a recortar gastos.
Y en el caso concreto de la
Generalitat Valenciana el primer afectado ha sido el parque móvil que
sufrirá una drástica reducción a la mitad de los vehículos que venían
manteniendo hasta el momento. Para que nos hagamos una idea, solo en el
segundo escalón de personas que trabajan en Presidencia, la reducción es
de 88 vehículos a 37.
Dicha reducción se completará con
la puesta en marcha de una subasta en la que se pondrán a disposición de
los interesados todos los vehículos que quedan fuera de su uso. En su
gran mayoría se trata de vehículos que estaban destinados a trasladar a
altos cargos.
El ahorro total previsto con la realización
de esta subasta alcanzaría los casi 400.000 euros, de los cuales cerca
de 130.000 vendrían de la propia subasta, mientras que el resto sería en
concepto de ahorro en combustible, seguros, revisiones técnicas, etc.
Los
vehículos que formarán parte de esta subasta ascienden a 72, divididos
en 61 Ford Mondeo y 11 Ford Focus. Estos vehículos se pondrán a la venta
en dos subastas que tendrán lugar en el primer semestre del año.
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